Un joven llega a confesarse y le dice al sacerdote:
—Padre, confieso que he pecado, le hice el amor a mi novia
El padre le dice:
—¡Hijo, eres un pecador!
El joven se defiende diciendo:
Padre, compréndame, visite a mi novia y era la única en casa, es que ella sola, yo solo, la casa sola y papas…
El padre dice:
Bueno hijo, te comprendo, pero igualmente eres un pecador
Pero padre eso no es todo, también le hice el amor a mi suegra
¡¡¡A tu suegra!!! ¡eres un degenerado!
Pero padre, comprenda, visite a mi novia, pero solo estaba mi suegra y pues mi suegra sola, yo solo, la casa sola y papas…
Difícil de comprender hijo, muy difícil
Pero padre, hay mucho más, es que también le hice el amor a la abuelita de mi novia
¡¿Queeé?! …… esto es el colmo – responde asustado el padre-
Pero padre, compréndame, visite a mi novia nuevamente y ahora solo estaba su abuela, pues la abuela sola, yo solo, esa casa sola y pues…..
¿Y, otra vez?
Si padre.
Hijo, esto es imposible de comprender
Pero padre, falta más todavía, le hice el amor a… a…
En ese momento sale el padre corriendo asustado y el joven le dice:
Padre.. ¿por qué corre? ¡termine de escucharme!
No hijo, ni madres, es que usted solo, yo solo, la iglesia sola….
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