Un constructor de ataúdes iba camino a dejar uno de sus encargos y su coche se descompuso.
Para no llegar tarde, cargó el último ataúd en su cabeza y siguió su camino.
Un policía lo detuvo y le preguntó:
¿Qué llevas y a dónde vas?
«No me gustó donde me enterraron y me estoy reubicando»
El policía se desmayó.
Chistes cortos buenos
- En el entierro de su suegra
- Puedo hacerlo en todos lados
- Por muy gallo que sea el gallo
- Tu esposo no para de ser infiel
- Ese bebé cuando crezca será muy hermoso
- El regalo que le daré a mi mejor amiga la chaparrita
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